La mejor carta de presentación que una página web puede ofrecer a un buscador, más allá de un diseño exclusivo o una cuidada programación, radica en sus propios contenidos.
El contenido de una página web es de vital importancia no sólo para el usuario, siendo el principal medio de comprensión del navegante en su primer contacto con una web, sino para los propios buscadores, ya que sus motores de búsqueda llevan a cabo su trabajo en función de los contenidos encontrados.
El buscador tenderá a clasificar la información insertada en una página web. Si los contenidos rastreados guardan una relación constante con una actividad en particular, el motor de búsqueda posicionará la página web de acuerdo a búsquedas específicas de los usuarios. Por este motivo el contenido es sin duda uno de los principales recursos para obtener un buen posicionamiento web, y es por ello que los contenidos de una página web deben aspirar a seguir reglas o pautas en arreglo a los propios buscadores.
Los buscadores no prestarán la misma atención a textos poco nutridos de términos o palabras clave, sobre todo si tenemos en cuenta que cada vez más páginas web se interesan por este aspecto.
Un contenido rico en palabras clave, términos específicos del contexto de la propia página web, es un trampolín para cualquier web en un buscador. Sin embargo, no se trata de repetir palabras una y otra vez, esperando que su numerosa pero desordenada presencia nos reporte algún tipo de ventaja. Es necesario conocer la mecánica de un buscador y saber cómo son capaces de distinguir un trabajo tramposo, basado en la rapidez sin criterio, de aquel sostenido con trabajo previo, planificación y una meticulosa redacción.
La adaptación de los contenidos de una página web a los motores de búsqueda se presenta como una labor mucho más ardua. Los textos que conforman una web deben nutrirse de palabras que guíen a los buscadores, pero su redacción debería aspirar en primer lugar a una fácil lectura para cualquier usuario y en segundo término a una adaptación favorable a los buscadores.
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